Los ácaros del polvo son diminutos insectos que se encuentran en nuestro hogar, se alimentan de la caspa de las mascotas y de los seres humanos, sus desechos son la causa principal de las alergias y el asma.

Los síntomas que se propician, de la alergia generada por los ácaros del polvo, regularmente son estornudos, goteo nasal, comezón en la nariz y congestión nasal. Si se tiene asma, los ácaros del polvo pueden incrementar la sibilancia y hacer que se necesite más medicamento para la misma.

Cuando alguien se acuesta en una cama infestada con ácaros del polvo, pueden tener más síntomas del asma; reducir la cantidad de estos insectos en el hogar es un paso de gran importancia.

Los ácaros del polvo prefieren lugares cálidos y húmedos, las almohadas, los colchones, las alfombras, aunque los muebles también son excelentes lugares para que vivan. El mantener limpio todo lo anterior, va generando una verdadera diferencia en la cantidad de ácaros del polvo en el hogar.

Para evitar que  los ácaros del polvo se encuentren en el colchón, es necesario colocar una cubierta de hilado cerrado a prueba de polvo así también lavar las sábanas, las mantas y las almohadas con agua muy caliente, todas las semanas.

Pasar la aspiradora sobre las alfombras y los tapizados todas las semanas puede ser de ayuda. Las aspiradoras con filtros de alto rendimiento, levantan más ácaros del polvo, pero incluso las aspiradoras estándar también son útiles.

Los muebles de plástico o de madera, sin demasiado acolchado, también pueden ayudar a hacer que la cantidad de ácaros del polvo en el hogar no aumente. Debido a que los ácaros del polvo prefieren los lugares cálidos y húmedos, es primordial bajar la humedad del hogar usando un deshumidificador.

Usar un paño o un trapo húmedo todas las semanas, para limpiar las superficies donde pueda recolectarse polvo, es muy benéfico.

Si se llega a tener algún tipo de enfermedad como el asma, hay que tener cuidado de que los ácaros del polvo no empeoren los síntomas.  

@10DedosdeFrente