La saliva es esa agua que tenemos en la boca y que producen nuestras glándulas salivales ubicadas dentro de cada mejilla, en la parte inferior de la boca y en el interior de la cavidad mandibular.
Un individuo puede llegar a producir 34 mil litros de saliva, imagina entonces cuánto más baboso puedes volverte si ves pasar a alguien que te gusta o se te antoja algo rico de comer, o cuando duermes con la boca abierta.
Pero cuando te asustas o tomas poca agua, su producción disminuye. La saliva es buenísima por muchas razones, humedece nuestros alimentos cuando comemos, ya que la lengua seca no es capaz de identificar los sabores sin ella, y nos ayuda en el proceso de digestión. Además de mantener la boca en buen estado, la saliva comparte muchas propiedades con la sangre; su utilización para detectar y diagnosticar enfermedades está siendo estudiada. La mayoría de los individuos producen la cantidad óptima de saliva para vivir, pero con la edad va disminuyendo.
Fuente: Baboso
10 Dedos de Frente 