En tiempos de cuarentena, en donde muchos de nosotros tenemos que quedarnos en casa y salir de nuestra rutina diaria, es cuando todo se vuelve confuso.
Sabemos que tenemos un horario para cada cosa, pero estando aislados el tiempo se vuelve en nuestra contra, sabernos limitados crea conflicto en nuestro pensamiento y costumbres, e incluso afecta al sueño.
Nuestro reloj biológico está programado en el hipotálamo cerebral, que al recibir la orden de la glándula pineal a través de la retina, establece nuestro período de sueño y con ello el descanso. Está sincronizado por la luminosidad del día como y al caer la noche por la obscuridad, dando la señal de luz baja que indica que es hora de dormir.
Celular, tablet, computadoras y televisores trabajan con luz LED y al estar expuestos constantemente nuestros ojos a una alta emisión de luz azul, muy diferente a la emitida por la luz del día, hay una alteración del sueño.
El neurobiólogo e investigador del Instituto de Investigaciones Biomédicas de la UNAM, Rudolf M. Buijs, lo definió como: The Circadian System and its Importance for Health (El sistema circadiano y su importancia para la salud).
“Si no nos comportamos en la forma en que nuestro reloj biológico nos dicta, como el dormir, comer y estar activos cambiará todo nuestro sistema, de forma tal que se podrían desarrollar patologías”.
Fuente: Sueño
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